Los memes e Internet… están hechos el uno para el otro.
No porque sean comunicación visual digital (aunque, por supuesto, lo son), sino porque son el producto de una mente colmena. Son la abreviatura de un grupo hiperconectado que piensa al unísono. Y, amigos, la mente colmena de la web es un lugar extraño (a menudo divertido, a veces peligroso).
Pero Dawkins acuñó el término en 1976, en su libro El gen egoísta, mucho antes de la Internet moderna, antes de que los memes se transformaran en lo que son ahora. En ese entonces, Dawkins hablaba de transmitir melodías de canciones culturales, estilos de arte, lo que sea.
Hoy en día, los habitantes de Internet piensan que los memes son bromas que se transmiten a través de los medios sociales en forma de imágenes (esas fotos de bebés o gatos o lo que sea con palabras en negrita en blanco y negro), hashtags (la cosa que modificó a lo que acaba de escribir en Twitter), GIFs (generalmente de una celebridad, estrella de la realidad o drag queen reaccionando a lo que acaba de escribir en Twitter), o videos (el video de Rick Astley ya es un clásico de los memes en la cultura americana).
Un meme para diseñadores
— Tomasz Łakomy (@tlakomy) January 26, 2020